Lear: un nuevo salto en el conflicto

TRAS LA 8A JORNADA NACIONAL Y LA CRISIS DEL “GENDARME CARANCHO”, TRABAJADORES DE LEAR SIGUEN INDOMABLES

27 Sep 2014   |   comentários

Septiembre 11, 2014

Federico Noa, PTS-sección argentina de la Fracción Trotskista-Cuarta Internacional

La lucha por la reincorporación de los despedidos de Lear tuvo un nuevo hito el jueves 4/9. Los despedidos volvieron a cortar la Panamericana, apoyados por estudiantes de la UBA, trabajadores de distintos sectores de Capital, Gran Buenos Aires y La Plata y por el PTS, que se viene jugando con todo por el conflicto. Y se coparon los medios.
La Gendarmería reprimió el corte de “la Pana”. Pero minutos después, lejos de menguar, la Jornada seguía con un “piquete móvil” en la colectora al que se sumaba luego una caravana que volvió a cortar la autopista. Pese al enorme operativo de la Gendarmería y de la Bonaerense, los despedidos volvían a protagonizar fuertes medidas de lucha.

El escándalo del “gendarme carancho”*

El video del “oso” Torales, el gigante saltarín, fue el símbolo que vieron millones en Argentina y el mundo. El primer video lo habían difundido nuestros compañeros del PTS el 31 de julio, y junto a otro, aparecido la semana pasada (difundido presumiblemente por algún sector de Gendarmería) incriminan al gendarme que fingió ser atropellado y también destapan al “servicio” que se infiltró en las acciones. Esta otra denuncia también surgió por un video del PTS del 1° de agosto. Un mes después, el domingo 31, en Página/12 Horacio Verbitsky tomó la denuncia citando a Myriam Bregman y al PTS, mostrando en carne propia las internas del kirchenrismo. La defensa ridícula de las acciones represivas por parte de Berni y el gobierno no hizo más que agudizar la crisis. A tal punto que tuvieron que echar al coronel Roberto Galeano por la infiltración, dejando a uno de los “hombres fuertes” del gobierno como Berni verdaderamente golpeado. 

Se fortalece la lucha

En este marco, frente a las denuncias del CeProDH sobre “la jaula” de plástico -montada por la empresa contra los delegados para separarlos de sus compañeros dentro de la fábrica- y sobre cómo se libera a la burocracia para hostigar a los miembros de la Comisión Interna, la Jueza Beatriz de Hermida ordenó a Lear cumplir los fallos que obligan a reinstalar a los delegados en sus puestos de trabajo en condiciones normales (sin agresiones de la burocracia) y al Ministerio de Trabajo a ir a la fábrica a garantizar que se cumplan esos fallos.

Así, entre las acciones de los despedidos que se mantienen fuertes y cada semana votan y realizan nuevas medidas junto a las organizaciones solidarias, y las denuncias legales y políticas que impulsamos contra la represión, contra la burocracia y contra la política cómplice del Ministerio de Trabajo, se fue golpeando a la empresa yanky Lear, al gobierno y a la burocracia.

El enorme apoyo popular a esta lucha es una base fundamental del conflicto, sobre la que las distintas medidas de lucha combinadas en diferentes terrenos llevó a que esta difícil pelea se abra paso y pegue un nuevo salto.

Los efectos de la crisis y la pelea para entren todos

Empresa, burocracia y gobierno están muy golpeados. La patronal desarmó la “jaula” casi de inmediato. El gobierno y la Gendarmería (encargada de las principales represiones) pagaron un gran costo político. Echaron a Galeano, uno de los jefes de los operativos, y bajaron considerablemente el despliegue cotidiano que rodea la carpa.

Por su parte el Ministerio citó y se reunió con la Comisión Interna el martes 10. La primera reunión oficial. Toda una señal del gobierno que empieza a reconocer a los delegados.

Distintos signos de fortalecimiento que deben ser la base para endurecer las medidas. La situación hoy es más favorable que en las semanas posteriores al lock out. 

Pegando cada semana con distintas acciones se salió de una situación compleja tras el lock out patronal y la asamblea de destitución de los delegados. Corte en 9 de Julio, corte en “la Pana” nuevamente, acciones estudiantiles, decenas de actividades para el fondo de lucha y para difundir el conflicto, denuncias legales y políticas, charlas y finalmente la Octava Jornada Nacional de Lucha.

Esa persistencia, sostenida esencialmente por los despedidos, los delegados y el PTS (incluso frente a organizaciones que venían apoyando y bajaron considerablemente sus esfuerzos como el PO o el MAS -que llegó a decretar la derrota en su prensa-), combinada con las contradicciones y crisis del gobierno abrieron una nueva situación. Aunque por supuesto es una lucha durísima, que sólo puede avanzar con nuevas y más contundentes medidas.
Hay que apoyar con todo lo votado por la asamblea. La marcha al Ministerio de Trabajo esta tarde es fruto de las fuerzas conquistadas que permiten movilizarnos para exigirle al gobierno una solución definitiva: ¡Todos adentro!

El Ministerio, según le dijo a los delegados, quiere abrir negociaciones que estarán plagadas de maniobras, más teniendo en cuenta las denuncias hechas a lo largo del conflicto contra el gobierno y el Ministerio por favorecer siempre a Lear -permitiendo que Ford importe cables, mandando veedores a las asambleas truchas del SMATA, dejando pasar despidos masivos sin “preventivo de crisis” que ellos mismos decretaron ilegales y, por supuesto, mandando a las fuerzas de seguridad a “custodiar” Lear y reprimir-. Lejos de confiar en las negociaciones que puedan abrirse, nos preparamos para redoblar las medidas con las banderas de la reincorporación de todos más altas que nunca.

SMATA: charros en Lear y en el Congreso

La conducción del gremio es uno de los grandes derrotados por el escándalo del “gendarme carancho” y no deja de desprestigiarse a lo largo del conflicto. Tras el escándalo de “la jaula” y del fallo judicial del martes 9 que ordena que los delegados deben estar normalmente en sus puestos de trabajo, inmediatamente el Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA) se dispuso a aumentar las agresiones. Desde que reingresaron los delegados de la Comisión Interna no dejan de ser hostigados por la burocracia Verde, a quien la patronal libera de tareas para que vayan a apretarlos.

El SMATA no acepta esta nueva realidad. El ingreso de los delegados fue un golpe a su política de destituirlos y sacarlos de la fábrica. Ahora sigue la pelea por el reingreso de los despedidos y contra la asamblea trucha del SMATA que (mediante la coacción) destituyó a los delegados.
En los próximos días se presentará ante la Justicia y el Ministerio una nueva denuncia por parte de Adolfo Pérez Esquivel, Nora Cortiñas y distintos referentes de organismos de derechos humanos contra las agresiones a los delegados.

El SMATA no solo quiere atacar dentro de Lear junto a la patronal. Afuera protagoniza episodios como el de ayer en la Cámara de Diputados, donde la burocracia fue al Congreso porque Nicolás del Caño, diputado del PTS-FIT (que estuvo en el corte de la Panamericana del jueves 4 y fue parte de los golpeados por Gendarmería) planteó una “moción de privilegio” en la sesión para denunciar las agresiones sufridas la semana pasada. Con acuerdo del oficialismo la burocracia entró al recinto e insultó a Del Caño cuando tomaba la palabra.

Hay que seguir enfrentando a la patota de Pignanelli, denunciando su ligazón con la empresa y el gobierno. Hoy la Verde de Pignanelli tiene el amparo de LEAR y quiere escalar con nuevas agresiones. Se preparan nuevas medidas para enfrentar a esta burocracia mafiosa en crisis.

Nuevas medidas

Redoblemos los esfuerzos para lograr lo más importante: que entren todos. El fondo de lucha debe seguir hasta llegar al millón de pesos y superarlo. Extendamos el apoyo popular a esta causa y sigamos sumando cada día más compañeros a las decenas de actividades que se hacen diariamente y en todo el país. Son cientos de miles los que hoy están mirando atentos al conflicto de Lear. Por eso tienen que triunfar.

* Gendarme carancho: ver http://www.pts.org.ar/El-escandalo-del-gendarme-carancho-llego-a-los-medios-internacionales









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