Recorte al gasto público: medida antipopular...

24 Feb 2015   |   comentários

Recorte al gasto público: medida antipopular

Diana Valdez

La drástica caída de los precios del petróleo de 100 a menos de 30 dólares por barril, provocó que ante la pérdida de ingresos petroleros para cubrir el presupuesto federal, el gobierno decidió recortar el gasto público.

En los últimos días de enero trascendió -en diversos medios de comunicación- que en una reunión del gabinete en Los Pinos, Peña Nieto tomó la decisión de hacer un importante recorte al gasto público para este año. Tras por lo menos 20 años de no tomarse medidas como esta, la necesidad de hacer frente a los nubarrones de crisis en la economía nacional, y ante las tendencias a la baja de la economía mundial, la decisión se toma a pesar de lo poco popular que suena en un año electoral.

El ajuste al gasto público 2015 es por 124.3 mil millones de pesos, de los cuales 31 mil 577 millones se recortarán al gasto social. El 60% de este corresponde a salud, educación, el campo y programas de desarrollo social. Y, aunque las autoridades han asegurado que no se afectará la calidad de la educación, no se detendrá el ataque de la reforma educativa.

El gobierno de EPN al anunciar que México no está preparado para enfrentar el inmenso boquete fiscal que implicó la caída de los precios del petróleo, muestra un flanco débil que se suma al descrédito que enfrenta el hasta hace poco “exitoso” presidente. Y es que la diferencia entre los ingresos esperados y los que se percibirán con las tendencias actuales, se estima en 10 mil millones de pesos mensuales. Si las tendencias internacionales no cambian, seguramente estaremos viviendo nuevos ajustes al presupuesto durante el año.

Los más afectados por las medidas tomadas por este gobierno privatizador, son los trabajadores. Serán la educación pública, los servicios de salud, los programas sociales y el campo los más golpeados. Seguramente habrá despidos y se reducirán las plazas laborales en estas áreas.

El recorte al gasto público le resta más margen de maniobra a Peña Nieto y a su delfín Luis Videgaray, en medio del contexto de crisis política nacional que atraviesa el régimen, a raíz de los asesinatos de los normalistas en Ayotzinapa y la desaparición de los 43, y en medio del proceso electoral en curso.

Las trabajadoras y los trabajadores vemos como a nosotros nos va cada vez peor y sólo a unos cuantos les resultan beneficiosas las medidas de los de arriba. En el MTS pensamos que, ante los recortes al gasto público -y en especial al gasto social- anunciados, los trabajadores tenemos que movilizarnos contra la profundización del ataque a nuestros bolsillos.

En contra de los recortes al presupuesto social, demandamos el ¡No pago de la deuda externa! y que se establezcan impuestos progresivos a las fortunas de los grandes empresarios nacionales e internacionales. Expropiación de las grandes propiedades que los políticos tienen en el país y el extranjero. Que los funcionarios públicos ganen lo mismo que una maestra o un obrero calificado. Junto a esto, ante la crisis petrolera, luchamos por echar atrás la reforma de PEMEX, que se renacionalicen todas las áreas de la industria energética y que el conjunto de esta industria se ponga bajo la gestión de sus trabajadores, organizados democráticamente.









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