Argentina: declaración del Partido de Trabajadores Socialistas

NI CON EL GOBIERNO NI CON LA OLIGARQUÍA

04 Apr 2008   |   comentários

Ni con esa plaza ni con esos piquetes

Los trabajadores debemos pelear por lo nuestro y unirnos con los obreros rurales y pequeños chacareros


El conflicto entre el gobierno y las “entidades del campo” ya está provocando una nueva fuerte suba de precios por la escasez de productos y desabastecimiento. Estamos pagando la disputa por una renta que no es para los trabajadores y el pueblo, gane quien gane esta pulseada.

La prueba más clara de que ninguno de los bandos en disputa merece ser apoyado es que en la Argentina de los Kirchner se continuó concentrando la tierra en cada vez menos dueños: 4000 grandes terratenientes tienen la mitad de las tierras agropecuarias, los 1000 mas grandes concentran 35 millones de hectáreas, en desmedro de los campesinos y pequeños chacareros. La “parte del león” del negocio de los cereales se lo llevan los cinco monopolios exportadores, Cargill, Bunge y Born, Dreyfus, Aceitera General Deheza y Vicentín que se se han venido beneficiando con la política del gobierno (de la misma manera que las petroleras y empresas mineras). Hasta el jefe de uno de ellos, Roberto Urquía de AGD, ¡es hoy senador por Córdoba del Frente para la Victoria!

Esta continuidad en el enriquecimiento de la oligarquía bajo los Kirchner, junto con el fortalecimiento de nuevos sectores capitalistas agrarios como el grupo “Los Grobo”, se dio mientras de los 1.300.000 obreros rurales un millón cobra sus salarios en negro, y aún rige en el campo, con el “gobierno de los derechos humanos”, la ley laboral de la dictadura militar redactada por el genocida Martínez de Hoz que no reconoce ni las horas extras ni el descanso dominical.

Aunque los cortes de ruta y las movilizaciones del interior están pobladas de pequeños chacareros, son esos grandes terratenientes y capitalistas del campo comandados por la Sociedad Rural los que dirigen el conflicto para imponer sus objetivos. Rechazan las retenciones a las exportaciones para apropiarse de las enormes ganancias por la subas de los precios internacionales que, de paso, se transforman en más inflación interna. No estamos con esos piquetes que bloquean alimentos al pueblo con el objetivo de engordar los bolsillos de la oligarquía.

Por su parte, los millones de dólares que viene recaudando el Estado nacional con los Kirchner por las retenciones no van para darles leche y alimento a los millones de pibes que están bajo el nivel de pobreza, ni para un plan nacional de obras públicas de hospitales, escuelas y facultades que se caen a pedazos, ni a un seguro universal para los permanecen desocupados, ni una remuneración digna a los jubilados, ni aumentos a los docentes y trabajadores estatales. Todo el superavit fiscal de estos años fue para pagar la deuda externa y subsidiar a los grandes empresarios, mientras a los trabajadores nos sacan hasta el 40% del salario mediante todo tipo de impuestos al consumo como el IVA. Esta es la “distribución de la riqueza” de los Kirchner. Para apoyar esta política, el gobierno, la CGT y los sindicatos de Moyano, junto a los movimientos oficialistas como el de D’Elía convocan a Plaza de Mayo para escuchar a Cristina. No estamos con esa Plaza de los que ponen techos salariales que se licúan con la inflación y mantienen las condiciones de precarización laboral para los trabajadores de la ciudad y el campo.

¿Qué salida tiene la crisis? Un programa de los trabajadores y el pueblo

Cristina miente. En su discurso de la semana pasada, con José Rodriguez del Smata y Moyano de la CGT en el palco, la presidenta dijo que los trabajadores hemos sido “responsables” por no reclamar mas aumento salarial que el 20% que ellos fijaron. ¿Quién puede estar conforme con los techos salariales que nos impusieron? Aún peor después de esta crisis con el campo que ya trajo como consecuencia una nueva escalada de precios y la amenaza de suspensiones y despidos ante la falta de materia prima. Frente a esta crisis nacional no podemos seguir detrás de este gobierno y sus patotas sindicales, sino salir a luchar por nuestras propias demandas y reclamos. Hay que enfrentar los despidos y suspensiones que los empresarios que vienen embolsando millones intentarán descargar sobre nosotros a causa de esta nueva crisis: mantenimiento de todos los empleos con salarios y premios, y apoyar con todo a los que ya están luchando contra los lock out patronales, como en la textil Mafissa de La Plata, que ya lleva 120 días de conflicto. Hay que exigir un salario equivalente al costo de la canasta familiar y una cláusula gatillo, de aumento automático según el incremento de la inflación de los productos de la canasta básica, a partir de la medición hecha por los trabajadores del INDEC no por su intervención K. Tenemos que elegir delegados paritarios en asamblea para la discusión de aumentos salariales y terminar con los convenios flexibilizadores impuestos en los ’90. Luchar para derogar la nefasta ley del menemismo que implementó las ART y provocó el aumento de las muertes y accidentes en el lugar de trabajo. Terminar con la superexplotación que significa el trabajo en negro.

No hay que entrar en la trampa que quieren imponer como una lucha entre el “campo” contra la “ciudad”, porque esto beneficia a la vez a la oligarquía y al gobierno.

Los trabajadores de las ciudades debemos levantar un programa para unirnos en primer lugar con los peones rurales, nuestros hermanos explotados del campo. Y también debemos buscar una alianza con los campesinos y pequeños chacareros, exigiendo a la Federación Agraria la ruptura de su actual alianza con la Sociedad Rural. Para luchar por una alianza obrera y de los pequeños chacareros contra la oligarquía y el gobierno, proponemos:

• Impuestos progresivos a los grandes propietarios y productores. Expropiación inmediata de los 1000 grandes propietarios agrícolas que poseen en conjunto 35 millones de hectáreas, para el establecimiento de estancias colectivas para un plan racional de producción agropecuaria y arrendamientos baratos de tierras nacionalizadas que permita repoblar el campo.

• Expropiación de los grandes monopolios exportadores. Monopolio nacional del comercio exterior para evitar que se especulen con los precios internacionales, que los pequeños productores perciban un precio acorde con sus necesidades y que el pueblo trabajador pueda adquirir alimentos a precios accesibles. Estatización bajo control obrero de los puertos privados para terminar con el contrabando y la evasión a las retenciones de los monopolios exportadores.

• Derogación de la ley videlista 22.248 y toda la normativa que esclaviza a los trabajadores del campo. Plena libertad de organización para los trabajadores.

• Estatización, bajo el control obrero, de la producción de semillas, agroquímicos y fertilizantes.

• Frente al desabastecimiento: confiscación inmediata y sin indemnización de los acaparadores de carne, aceites, harinas y azúcar.

Partido de los Trabajadores Socialistas (31/03/08)

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ANTE LA CRISIS POLITICA NACIONAL

Acto de la izquierda en el Obelisco: “Ni con el gobierno ni con la oligarquía”


(PTS, 28 de marzo/2008) Christian Castillo, del Partido de los Trabajadores Socialistas –PTS– sostuvo hoy en un acto realizado en el Obelisco convocado por el PTS, el PO, el MAS y otras organizaciones que “impulsamos este acto unitario para decir que frente a la crisis política nacional, no estamos ni con el gobierno ni con la oligarquía. En la Argentina de los Kirchner y la oligarquía agraria, 1.300.000 obreros del campo, de los cuales un millón cobra en negro, aún hoy trabajan bajo la ley laboral de la dictadura redactada por el genocida Martínez de Hoz”.

Castillo sostuvo que “Los millones de dólares que recauda el Estado nacional con los Kirchner no fueron para darles leche y alimento a los millones de pibes que están bajo el nivel de pobreza, para un plan nacional de obras públicas al servicio del pueblo pobre, para un seguro universal para todos los desocupados, para darles una remuneración digna a los jubilados, para una salud y educación públicas acordes con las necesidades populares, sino para pagar la deuda externa y subsidiar a los grandes empresarios”.

Por otro lado, señaló Castillo “las expresiones de rechazo a la política del gobierno por parte de los pequeños productores al darse tras la consigna indiferenciada de ’no a las retenciones’ que sostienen en común con la Sociedad Rural, favorecen a los grandes terratenientes y los exportadores que aún hoy continúan haciendo su agosto”.

“Los trabajadores tenemos que luchar por nuestras propias demandas y buscar la unidad con los peones rurales y los pequeños chacareros”, finalizó.

Declaración unitaria

Contra la Oligarquía, contra el Gobierno K. Por una salida de izquierda, obrera y socialista a la crisis

Por la nacionalización de la gran propiedad agraria, y su arrendamiento a pequeños productores y trabajadores. Por la nacionalización del comercio exterior y de los puertos privados, bajo control de trabajadores y de pequeños productores.

Derogación de la ley videlista del peón rural. Pleno derecho de organización. Salario igual a la canasta familiar para el trabajador del campo.

Salario igual a la canasta familiar para todos los trabajadores. Paritarias libres, sin techos salariales, y con representantes electos por la base.

No al desalojo de los pueblos originarios de sus tierras, por parte de la “patria sojera”.

Convocantes:

Partido Obrero (PO), Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), Movimiento al Socialismo (MAS), Partido Comunista de los Trabajadores (PCT), Partido Revolucionario (marxista-leninista)

mas información en el sitio web del Partido de Trabajadores Socialistas: http://www.pts.org.ar









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