Los padres de los 43 normalistas llaman a no votar en las elecciones del 2015

10 Jan 2015   |   comentários

Una vez develado por distintos medios periodísticos la presunta participación de la Policía Federal y el Ejército en el caso del asesinato y desaparición de los estudiantes de la normal de Ayotzinapa, diversas manifestaciones han persistido en varios estados del país.

Las elecciones del 2015 empañadas por el caso Ayotzinapa

El martes 6 de enero iniciará el proceso electoral donde se disputarán más de 2 mil cargos de elección popular. Dichas elecciones, que en general anticipan las tendencias electorales de todo el sexenio, renovarán los 500 curules de la cámara de diputados, varias diputaciones, alcaldías y las gubernaturas en 9 estados.

Uno de los estados en disputa será nada menos que Guerrero, entidad cruzada por las persistentes movilizaciones del magisterio, el normalismo y sectores populares por la aparición con vida de los desaparecidos de la normal rural “Isidro Burgos”.

Pero estas elecciones, las primeras a cargo del recientemente creado Instituto Nacional Electoral, están empañadas por el descrédito de todos los partidos tradicionales, cuestionados por sus lazos con el narcotráfico y la férrea represión que han ejercido contra los movimientos sociales.

El caso de los normalistas desaparecidos, si bien ha intentado ser tratado como una cuestión local por el gobierno federal, ha cimbrado al conjunto de las instituciones y muy probablemente impactará en la participación en las urnas de este año.

Llamado a no votar

Durante la manifestación del 27 de diciembre que arribó al movimiento a la Revolución, varios de los padres denunciaron que no han tenido respuesta alguna de las autoridades federales sobre la desaparición de sus hijos y llamaron a no votar “porque los que voten por otro gobierno igual al que tenemos, no tienen madre ni hijos”.

Externaron su indignación frente al hecho de que los normalistas permanezcan desaparecidos, que haya indicios de la complicidad de instancias federales y que la clase política esté preocupada por la cantidad de votos que debe recibir.

Frente a la crisis política más importante en la historia reciente del régimen mexicano, es previsible que las elecciones del 2015 estén flanqueadas por el profundo descontento y la deslegitimación de todos los partidos y actores políticos.









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