Universidad

Castigo a los asesinos de los estudiantes en Ecuador

04 Apr 2008   |   comentários

El pasado 1° de marzo, el ejército colombiano bombardeó un campamento de las FARC en suelo ecuatoriano. En este cruento ataque, al más puro estilo de los bombardeos yanquis sobre Irak, el ejército de Uribe asesino a Raúl Reyes (segundo dirigente de las FARC) y otros de sus compañeros.

En el campamento se encontraban estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, realizando labores de investigación social y haciendo válido el derecho de acercarse a manifestar su repudio al Plan Colombia y la política contrainsurgente del gobierno pro imperialista de Uribe.

Esta incursión exige que los estudiantes repudiemos este ataque del gobierno colombiano y su “lucha antiterrorista” bajo el pretexto de velar por "la seguridad interna".

Es importante también que rechacemos tanto el Plan Colombia como el Plan Mérida implementado en nuestro país, así como toda ofensiva del imperialismo sobre América Latina, por ello es fundamental la movilización social y la solidaridad internacional para echar a los yanquis de la región, y exigir la desaparición de las bases militares norteamericanas en la misma.

Los responsables de la masacre de Raúl Reyes y sus compañeros tienen que ser castigados, así como quienes asesinaron a los cuatro compañeros estudiantes y a quien resulte responsable de los daños a la integridad de la compañera universitaria Lucía Andrea Morett Álvarez, todos los cuales, como se ha declarado, se encontraban realizando una labor de investigación sobre la problemática social latinoamericana.

Más allá de no compartir la estrategia política de las FARC, nos solidarizamos con las mismas ante cualquier ataque del estado burgués colombiano, y exigimos su reconocimiento como fuerza beligerante (y no como organización terrorista, como Uribe y los EE.UU. las llaman con la intención de legitimar la masacre). Así mismo, hay que denunciar la subordinación a los planes imperialistas del gobierno de Bush por parte de distintos gobiernos latinoamericanos (como Uribe y Calderón). En ese sentido, el gobierno mexicano debería condenar la acción asesina y romper relaciones con el gobierno colombiano.

En este contexto, queda una vez más demostrado que la parcialidad de la intervención de organismos como la OEA, controlados según los intereses de EE.UU., no pueden ofrecer nada favorable para las masas de la región: la cumbre celebrada en Santo Domingo resolvió un acuerdo que demuestra que, más allá de los discursos condenatorios, se termina priorizando la estabilidad reaccionaria del continente, en contra de los pueblos y su lucha contra la opresión imperialista.

EL ATAQUE DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN

Es necesario denunciar la campaña tergiversadora y facciosa de los medios de comunicación, que son la cobertura de una criminalización y estigmatización de la participación política de aquellos estudiantes que se solidarizan con las luchas obreras y populares en México y América Latina.

Ahora, con la reaccionaria Reforma Judicial, se atacarán derechos elementales como la libertad de asociación, reunión, expresión y disensión; además de que se desató una campaña que pretende legitimar la agresión y persecución a los luchadores sociales y a todo aquel que se oponga a los planes de la rectoría y el gobierno en la universidad.

Exigimos el alto a la criminalización de la investigación social y de la participación solidaria de los estudiantes en las luchas de los trabajadores y el pueblo. Es una tarea elemental y de primer orden impulsar una amplia campaña en solidaridad con Lucia Morett y con las familias de los estudiantes asesinados, construyendo comités de apoyo en todas las escuelas y universidades del país, integrados por estudiantes, académicos y trabajadores. Esto, como parte de una lucha más amplia contra la represión y la persecución del activismo estudiantil.

Desde la LTS-Contracorriente y la agrupación universitaria En Clave Revolucionaria lanzamos una propuesta a los colectivos, activistas y corrientes estudiantiles: impulsar la reorganización de un movimiento estudiantil combativo e independiente contra los planes sobre la universidad pública y junto a las luchas de los trabajadores, los campesinos y del pueblo. Para eso llamamos a construir una gran coordinadora estudiantil en la UNAM y el resto de las universidades publicas del país que agrupe todas las experiencias que se están llevando a cabo (como la “Asamblea Universitaria de la UNAM”, el Encuentro Nacional de Estudiantes en defensa del petróleo, etc.) y que haga efectiva esta pelea. Junto a esta Estrategia Obrera te entregaremos la “carta abierta”, donde presentamos esta propuesta, la cual se esta difundiendo ampliamente en la UNAM, la UACM, la UAM y otras universidades.









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